Contenido
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¿Qué son las enfermedades de transmisión sexual?
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¿Cuáles son los síntomas de las enfermedades de transmisión sexual?
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¿Qué causa las enfermedades de transmisión sexual?
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Diagnostico de las enfermedades de transmisión sexual
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Tratamiento de las enfermedades de transmisión sexual
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Complicaciones
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Consejos estilo de vida
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Estrategias de afrontamiento y apoyo
1. ¿Qué son las enfermedades de transmisión sexual?
Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) y/o las infecciones de transmisión sexual (ITS) en general se contraen por contacto sexual. Los organismos que causan las enfermedades de transmisión sexual pueden pasar de una persona a otra por la sangre, el semen, el fluido vaginal u otros fluidos corporales.

A veces, estas infecciones se transmiten por vías que no son sexuales; por ejemplo, de madre a hijo durante el embarazo o el parto, por transfusiones de sangre o agujas compartidas.
Es posible contraer enfermedades de transmisión sexual de personas que parecen muy sanas y que, incluso, pueden no saber que tienen la infección. Las ETS no siempre presentan síntomas; por esta razón, los expertos prefieren el término «infecciones de transmisión sexual» en vez de «enfermedades de transmisión sexual».
Las enfermedades de transmisión sexual comprenden un amplio grupo de enfermedades infecciosas y parasitarias en las que el método de transmisión habitual es el contacto sexual. Siendo reconocidas las infecciones por distintos tipos de microrganismos como son las bacterias (gonorrea, sífilis, clamidiosis), parásitos (tricomoniasis) y virus (papiloma humano, herpes genital y VIH).
2. ¿Cuáles son los síntomas de las enfermedades de transmisión sexual?
Si tienes relaciones sexuales — orales, anales o vaginales y contacto genital — puedes contraer una de las enfermedades de transmisión sexual (ETS), también conocida como infección de transmisión sexual (ITS). Heterosexual u homosexual, casado o soltero, eres vulnerable a las ITS y sus síntomas. Pensar o desear que tu pareja no tenga una ITS no significa que estés protegido — debes estar seguro. Además, aunque los condones son altamente efectivos en reducir la transmisión de algunas ITS, ningún método es infalible.

Los síntomas de las ITS no siempre son evidentes. Si crees que tienes síntomas de una ITS o has estado expuesto a una, consulta al médico. Algunas ITS son fáciles de tratar y curar; otras requieren tratamientos más complicados para manejarlas.
Es esencial que te sometas a una evaluación, y — en caso de ser diagnosticado con una ITS — comenzar el tratamiento. También es esencial informar a tu pareja o parejas para que ellos también puedan ser evaluados y tratados.
Si no te tratas, la ITS puede incrementar tu riesgo de contraer otra ITS como VIH. Esto sucede debido a que una ITS puede estimular una respuesta inmunitaria en el área genital o provocar úlceras, lo que puede incrementar el riesgo de transmisión de VIH. Algunas ITS también pueden provocar infertilidad.
Las ITS con frecuencia son asintomáticas
Con frecuencia las ITS no presentan signos ni síntomas (son asintomáticas). Sin embargo, aunque no presentes síntomas, puedes transmitir la infección a tus parejas sexuales. Por esta razón, es importante usar protección, como el condón, durante las relaciones sexuales, y visitar a tu médico regularmente para detectar ITS, con el fin de identificar y tratar una infección antes de transmitirla a alguien más.
Algunas de las siguientes enfermedades, como la hepatitis, pueden ser transmitidas sin necesidad de contacto sexual, al entrar en contacto con la sangre infectada de una persona. Otras, como la gonorrea, pueden ser transmitidas únicamente por contacto sexual.
Síntomas generales
Las infecciones de transmisión sexual (ITS) pueden presentar una diversidad de signos y síntomas, o no manifestar síntomas. Por ese motivo pueden pasar desapercibidas hasta que ocurre una complicación o se le diagnostica la infección a la pareja. Entre los signos y síntomas que podrían indicar la presencia de una ITS se incluyen:

- Llagas o protuberancias en los genitales o en la zona bucal o rectal
- Dolor o ardor al orinar
- Secreción del pene
- Flujo vaginal con mal olor u olor inusual
- Sangrado vaginal fuera de lo normal
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Ganglios linfáticos inflamados y doloridos, particularmente en la ingle, pero otras veces más generalizado
- Dolor en la parte baja del abdomen
- Fiebre
- Erupción cutánea en el tronco, manos o pies
Los signos y síntomas pueden aparecer a los pocos días después de haber estado expuesto, o pueden pasar años hasta que se presenten los problemas; depende de cada organismo.
Síntomas de clamidia

La clamidia es una infección bacteriana en tu zona genital. La clamidia puede ser difícil de detectar debido a que las infecciones en etapa temprana generalmente causan pocos signos y síntomas o no causan ninguno. Cuando se presentan, por lo regular, comienzan de una a tres semanas después de haber estado expuesto a la clamidia. Incluso cuando se presentan signos y síntomas, éstos suelen ser leves y pasajeros, haciendo que sea fácil ignorarlos.
Los signos y síntomas incluyen:
- Dolor al orinar
- Dolor en el abdomen bajo
- Secreción vaginal en mujeres
- Secreción del pene en hombres
- Dolor durante el acto sexual en mujeres
- Sangrado entre periodos en mujeres
- Dolor testicular en hombres
Síntomas de la gonorrea
La gonorrea es una infección de transmisión sexual provocada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae o gonococo, en tu zona genital. También puede crecer en tu boca, garganta, ojos y ano. Los primeros síntomas de gonorrea aparecen generalmente 10 días después de la exposición. Sin embargo, algunas personas pueden estar infectadas por meses antes de presentar signos o síntomas.

Los signos y síntomas de gonorrea incluyen:
- Secreción espesa, sanguinolenta o turbia del pene o la vagina
- Dolor y sensación de ardor al orinar
- Sangrado menstrual abundante o sangrado entre periodos
- Dolor e inflamación de testículos
- Deposiciones dolorosas
- Comezón anal
Síntomas de tricomoniasis
La tricomoniasis es una ITS causada por un parásito unicelular microscópico conocido como Trichomonas vaginalis. Este organismo se esparce durante el acto sexual con alguien que es portador de la infección.
El organismo infecta el tracto urinario en hombres; sin embargo, a menudo no causa síntomas. La tricomoniasis regularmente infecta la vagina en mujeres. Cuando la tricomoniasis presenta síntomas, aparecen de 5 a 28 días posteriores a la exposición y varían desde irritación leve hasta inflamación grave.

Los signos y síntomas incluyen:
- Secreción vaginal transparente, blanca, verdosa o amarillenta
- Secreción del pene
- Olor vaginal fuerte
- Comezón vaginal o irritación
- Comezón o irritación dentro del pene
- Dolor durante el acto sexual
- Dolor al orinar
Síntomas de VIH

El VIH es una infección por el virus de inmunodeficiencia humana. El VIH interfiere con la capacidad de tu cuerpo para combatir los virus, las bacterias y los hongos que provocan la enfermedad, además puede llevarte a contraer SIDA, una enfermedad crónica mortal.
Al infectarte con VIH, no presentas síntomas. Algunas personas desarrollan una enfermedad similar al resfriado, por lo general de dos a seis semanas después de haber sido infectadas. Aun así, la única forma de saber si tienes VIH es realizándote pruebas.
Signos y síntomas en etapa temprana
Los signos y síntomas de VIH en etapa temprana pueden incluir:
- Fiebre
- Dolor de cabeza
- Dolor de garganta
- Glándulas linfáticas inflamadas
- Sarpullido
- Fatiga
Estos signos y síntomas en etapa temprana regularmente desaparecen en un período de una semana a un mes y normalmente se confunden con aquellos causados por otra infección viral. Durante este periodo, eres una persona altamente infecciosa. Es posible que los síntomas más persistentes o graves causados por el VIH no se presenten durante 10 años o más después de la infección inicial.
Conforme el virus continúa multiplicándose y destruyendo células inmunitarias, puedes desarrollar infecciones leves o signos y síntomas crónicos como:
- Ganglios linfáticos inflamados — regularmente uno de los primeros signos del VIH
- Diarrea
- Pérdida de peso
- Fiebre
- Tos y dificultad para respirar
VIH en etapa avanzada
Los signos y síntomas del VIH en etapa avanzada incluyen:

- Fatiga persistente e inexplicable
- Sudoración nocturna excesiva
- Escalofríos intensos o fiebre superior a 100.4 F (38 °C) durante varias semanas
- Inflamación de ganglios linfáticos durante más de tres meses
- Diarrea crónica
- Dolores de cabeza persistentes
- Infecciones oportunistas inusuales
3. ¿Qué causa las enfermedades de transmisión sexual?
Las infecciones de transmisión sexual pueden provocarse por:
- Bacterias (gonorrea, sífilis, clamidiosis)
- Parásitos (tricomoniasis)
- Virus (papiloma humano, herpes genital, VIH)
La actividad sexual cumple una función en la propagación de muchos otros agentes infecciosos, si bien es posible infectarse sin contacto sexual. Los organismos que causan las enfermedades de transmisión sexual pueden pasar de una persona a otra por la sangre, el semen, el fluido vaginal u otros fluidos corporales.
Factores de riesgo
Toda persona sexualmente activa está en riesgo de exponerse, en cierto grado, a una infección de transmisión sexual.
Los factores que pueden aumentar ese riesgo incluyen:
- Tener relaciones sexuales sin protección. La penetración vaginal o anal por una pareja infectada que no usa un preservativo de látex aumenta significativamente el riesgo de adquirir una ITS. El uso incorrecto o irregular de preservativos también puede aumentar tu riesgo.
El sexo oral puede ser menos riesgoso, pero aun así las infecciones se pueden transmitir sin el uso de un preservativo de látex o un protector bucal. Los protectores bucales (piezas delgadas, cuadradas, de goma, fabricadas con látex o silicona) evitan el contacto piel con piel.

- Tener relaciones sexuales con varias parejas. El riesgo es mayor cuando tienes relaciones sexuales con más cantidad de personas. Así sean parejas simultáneas o relaciones monogámicas consecutivas.
- Tener antecedentes de ITS. Si ya has tenido una ITS es mucho más fácil que tengas otra.
- Cualquier persona forzada a tener una relación sexual o actividad sexual. Afrontar una violación o agresión puede ser muy difícil pero es importante hacer una consulta tan pronto como sea posible. Se ofrece análisis de detección, tratamiento, y apoyo emocional.
- El abuso de alcohol o el uso de drogas recreativas. El abuso de sustancias puede inhibir tu sentido común y predisponerte a tener comportamientos riesgosos.
- La inyección de drogas. Compartir agujas propaga muchas infecciones graves, entre ellas, el VIH, la Hepatitis B y la Hepatitis C.
- Ser joven. La mitad de las ITS ocurren en personas de 15 a 24 años.
- Hombres que solicitan recetas para medicamentos que tratan las disfunciones eréctiles. Los hombres que piden a sus médicos recetas para ciertos medicamentos, como sildenafil (Viagra), tadalafil (Cialis) y vardenafil (Levitra), tienen mayor riesgo de contraer una ITS. Si le pides a tu médico alguno de estos medicamentos, asegúrate de estar informado y tener relaciones sexuales seguras.
4. Diagnostico de las enfermedades de transmisión sexual
Si tus antecedentes sexuales y tus signos y síntomas actuales sugieren que tienes una infección de transmisión sexual, los análisis de laboratorio pueden identificar la causa y detectar las infecciones que puedes haber contraído.

- Análisis de sangre. Los análisis de sangre pueden confirmar el diagnóstico de VIH y las etapas finales de la sífilis.
- Muestras de orina. Algunas infecciones de transmisión sexual se pueden confirmar mediante una muestra de orina.
- Muestras de líquidos. Si tienes llagas genitales activas, se pueden analizar los líquidos y muestras de las llagas para diagnosticar el tipo de infección. Los análisis de laboratorio del material de una secreción o llaga genital se utilizan para diagnosticar algunas infecciones de transmisión sexual.
Estudios diagnostico para detección de infecciones de transmisión sexual específicas
A continuación te damos algunas pautas sobre los análisis para detección de infecciones de transmisión sexual específicas.
Clamidia y gonorrea
Realízate un análisis para detección anual si:

- Eres una niña o mujer menor de 25 años sexualmente activa
- Eres una mujer mayor de 25 años y corres el riesgo de tener infecciones de transmisión sexual, por ejemplo, si tienes sexo con una nueva pareja o con múltiples parejas
- Eres un hombre que tiene relaciones sexuales con hombres
- Tienes VIH
- Has sido forzado a tener un acto sexual o a participar en una actividad sexual en contra de tu voluntad
El análisis para detección de clamidia y gonorrea se realiza a través de un análisis de orina o a través de un hisopado dentro del pene en los hombres o del cuello uterino en las mujeres. Posteriormente, la muestra se analiza en un laboratorio. Los análisis para detección son importantes, ya que si no tienes signos ni síntomas, puedes no saber que tienes alguna de estas infecciones.
VIH, sífilis y hepatitis
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (Centers for Disease Control and Prevention) recomiendan la realización del análisis de VIH, por lo menos una vez, como parte rutinaria de la atención médica si eres adolescente o un adulto de entre 15 y 65 años. Los adolescentes más jóvenes deberían realizarse el análisis si tienen un riesgo elevado de padecer una infección de transmisión sexual. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades aconsejan la realización de análisis de VIH anuales si tienes un riesgo elevado de infección.
El análisis para detección de hepatitis C se recomienda a todas las personas que nacieron entre 1945 y 1965. La incidencia de la hepatitis C es alta en este grupo etario, y la enfermedad suele no presentar síntomas hasta que está avanzada. Hay vacunas disponibles tanto para la hepatitis A como para la hepatitis B si el análisis para detección indica que no estuviste expuesto a estos virus.
Solicita un análisis de VIH, sífilis y hepatitis si:

- El resultado es positivo para otra infección de transmisión sexual, lo que aumenta tu riesgo de tener otras infecciones de transmisión sexual
- Has tenido más de una pareja sexual desde tu último análisis
- Usas medicamentos intravenosos (i.v.)
- Eres un hombre que tiene relaciones sexuales con hombres
- Estás embarazada o planeas quedar embarazada
- Has sido forzado a tener un acto sexual o a participar en una actividad sexual en contra de tu voluntad
El médico realiza el análisis para detección de sífilis mediante una muestra de sangre o un hisopado de cualquier llaga genital que puedas tener. La muestra se examina en un laboratorio. Para realizar el análisis de VIH y hepatitis, se toma una muestra de sangre.
Herpes genital
No existe ningún análisis adecuado para detección de herpes, una infección viral que se puede transmitir incluso cuando una persona no tiene síntomas. El médico puede tomar un raspado del tejido o un cultivo de las ampollas o úlceras iniciales, si tienes, para analizar en un laboratorio. Sin embargo, un resultado negativo no descarta el herpes como causa de las úlceras genitales.

Un análisis de sangre también puede ayudar a detectar una infección por herpes, pero los resultados no siempre son definitivos. Algunos análisis de sangre pueden ayudar a diferenciar entre los dos tipos principales de virus del herpes. El tipo 1 es el virus que normalmente provoca el herpes labial, aunque también puede provocar el herpes genital. El tipo 2 es el virus que normalmente provoca el herpes genital. Aun así, los resultados pueden no ser totalmente claros, según la sensibilidad de la prueba y la etapa de la infección. También es posible obtener resultados falsos positivos y falsos negativos.
Virus del papiloma humano

Ciertos tipos del virus del papiloma humano (VPH) pueden provocar cáncer de cuello uterino, mientras que otras variedades del VPH pueden provocar verrugas genitales. La mayoría de las personas sexualmente activas se infectan con el VPH en algún momento de sus vidas, pero nunca presentan síntomas. El virus por lo general desaparece dentro de los dos años.
No hay ningún análisis para detección del VPH en los hombres, en quienes la infección se diagnostica únicamente a través de una inspección visual o de una biopsia de las verrugas genitales. En las mujeres, el análisis del VPH comprende:
- Papanicolaou. A las mujeres de entre 21 y 65 años se les recomienda que se realicen pruebas de Papanicolaou, que detectan si hay células anormales en el cuello uterino, cada tres años.
- Prueba del VPH. A las mujeres mayores de 30 años se les puede ofrecer la opción de realizarse una prueba del VPH junto con un Papanicolaou cada cinco años si los resultados de los análisis anteriores fueron normales. A las mujeres de entre 21 y 30 años se les realizará una prueba del VPH si los resultados del Papanicolaou fueron anormales.
El VPH también ha sido relacionado con el cáncer de vulva, vagina, pene, ano, y boca y garganta. Las vacunas pueden proteger tanto a los hombres como a las mujeres de algunos tipos de VPH, pero son más efectivas cuando se las administra antes de que comience la actividad sexual.
Resultados positivos del examen
Si obtienes un resultado positivo para una enfermedad de transmisión sexual (ETS), el siguiente paso es considerar análisis adicionales, y luego realizar el tratamiento que te recomiende el médico. Además, debes informárselo a tus parejas sexuales. Dado que algunas infecciones se pueden transmitir de forma recíproca, tus parejas deben realizarse análisis y recibir tratamiento.
Es de esperar que tengas varias emociones. Es posible que te sientas avergonzado, enojado o que tengas miedo. Podría ser de ayuda recordar que hiciste lo correcto al realizarte análisis para poder informarles a tus parejas y recibir tratamiento. Habla con el médico sobre tus preocupaciones.
5. Tratamiento de las enfermedades de transmisión sexual
Las infecciones de transmisión sexual causadas por bacterias son generalmente más fáciles de tratar. Las infecciones virales se pueden controlar, pero no siempre se pueden curar. Si estás embarazada y tienes una enfermedad de transmisión sexual, el tratamiento inmediato puede prevenir o reducir el riesgo de una infección para tu bebé.

El tratamiento generalmente consiste en una de las siguientes opciones, dependiendo el tipo de infección:
- Antibióticos. Los antibióticos, que generalmente se usan en una sola dosis, pueden curar muchas de las infecciones producidas por parásitos o bacterias transmitidas sexualmente, incluidas la gonorrea, la sífilis, la clamidia o la tricomoniasis. Generalmente, recibirás un tratamiento para la gonorrea y la clamidia al mismo tiempo porque las dos infecciones frecuentemente ocurren juntas.
Una vez que comienzas con el tratamiento de antibióticos, es muy importante que lo continúes. Si piensas que no podrás tomar el medicamento como se te haya indicado, habla con tu médico. Pueden darte un tratamiento más corto y simple.
Además, es importante abstenerse de las relaciones sexuales hasta haber terminado el tratamiento y que se hayan curado todas las llagas.
- Tendrás pocas recurrencias de herpes si sigues a diario la terapia inhibidora con un antiviral recetado. Los antivirales disminuyen el riesgo de infección, aunque aún hay posibilidades de que le transmitas herpes a tu pareja.

Los antivirales pueden mantener bajo control la infección de VIH durante varios años. Pero el virus persiste y todavía se puede contagiar, aunque el riesgo sea menor.
Cuanto antes comiences el tratamiento, más efectivo será. Una vez que comiences el tratamiento, si tomas los medicamentos exactamente como se te ha indicado, es posible reducir el conteo del virus hasta niveles casi indetectables.
Si has tenido una enfermedad de transmisión sexual, consulta con tu médico cuándo deberías volver a hacerte el análisis. Hacer esto garantiza que el tratamiento ha sido eficaz y que no te has infectado nuevamente.
6. Complicaciones
Debido a que, en las primeras etapas de una infección de transmisión sexual, muchas personas no tienen síntomas, es importante realizarse exámenes para detección de infecciones de transmisión sexual de modo de evitar complicaciones.
Las posibles complicaciones incluyen:

- Dolor pélvico
- Complicaciones en el embarazo
- Inflamación ocular
- Artritis
- Enfermedad pélvica inflamatoria
- Esterilidad
- Enfermedades cardíacas
- Ciertos tipos de cáncer, como el cáncer rectal y cervical asociado con el virus del papiloma humano (VPH)
7. Consejos estilo de vida
Existen varias formas de evitar o reducir el riesgo de contraer infecciones de transmisión sexual.
- Abstente. La forma más eficaz de evitar las infecciones de transmisión sexual es abstenerse de las relaciones sexuales.
- Permanece con una pareja que no esté infectada. Otra forma confiable de evitar las infecciones de transmisión sexual es tener una relación mutuamente monógama a largo plazo con una pareja que no esté infectada.

- Espera y verifícalo. Evita las relaciones sexuales vaginales y anales con parejas nuevas hasta que ambos se hayan realizado exámenes para detectar infecciones de transmisión sexual. El sexo oral es menos riesgoso, pero usa un preservativo de látex para evitar el contacto directo entre las membranas mucosas orales y genitales. Ten en cuenta que no existe ningún buen examen para detección de herpes genital para cualquier tipo de sexo, y el examen para detección del virus del papiloma humano (VPH) no está disponible para hombres.
- Vacúnate. Vacunarte con anticipación, antes de la exposición sexual, también es eficaz para prevenir ciertos tipos de infecciones de transmisión sexual. Hay vacunas disponibles para prevenir el virus del papiloma humano (VPH), la hepatitis A y la hepatitis B. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan la vacuna contra el VPH en niñas y niños de 11 y 12 años. Si no están totalmente vacunados a los 11 y 12 años, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan que las niñas y mujeres de hasta 26 años y los niños y hombres de hasta 26 años reciban la vacuna.

- Usa preservativos y protectores bucales siempre y correctamente. Usa un preservativo de látex o protector bucal nuevo cada vez que tengas relaciones sexuales, ya sean orales, vaginales o anales. Nunca uses un lubricante a base de aceite, como vaselina, con un preservativo de látex o un protector bucal.
- No bebas alcohol en exceso ni consumas drogas. Si estás bajo la influencia de alcohol o drogas, es más probable que corras riesgos sexuales.
- Comunícate. Después de un contacto sexual importante, habla con tu pareja sobre cómo tener relaciones sexuales más seguras. Lleguen a un acuerdo claro sobre las actividades que permitirán y las que no.
- Considera la circuncisión masculina. Existen pruebas de que la circuncisión masculina puede ayudar a los hombres a reducir el riesgo de contagiarse VIH de una mujer infectada (transmisión heterosexual) en hasta un 60 por ciento. Además, la circuncisión masculina puede prevenir la transmisión del VPH genital y el herpes genital.
8. Estrategias de afrontamiento y apoyo
Descubrir que padeces una infección de transmisión sexual es traumático. Es posible que te enojes si crees que te traicionaron o te avergüences si existe la posibilidad de que hayas infectado a otras personas. En el peor de los casos, una infección de transmisión sexual puede provocar enfermedades crónicas y la muerte, incluso con la mejor atención médica del mundo.
Entre esos extremos existe una gran cantidad de pérdidas posibles: la confianza de tu pareja, tus planes de tener hijos y el alegre disfrute de tu sexualidad y su expresión.

Estas son formas de enfrentar la situación:
- Espera para echar culpas. No saques conclusiones apresuradas y pienses que tu pareja te engañó. Es posible que alguno de los dos (o ambos) se haya infectado por una pareja anterior.
- Sé sincero con los profesionales del cuidado de la salud. Su trabajo no es juzgarte, sino evitar la propagación de infecciones de transmisión sexual. Todo lo que les cuentes será confidencial.
- Comunícate con tu departamento de salud. Si bien es posible que no cuenten con el personal y los fondos necesarios para ofrecer servicios integrales, los departamentos de salud locales cuentan con programas para infecciones de transmisión sexual que proporcionan análisis confidenciales, tratamientos y servicios para las parejas
